¿Cómo puede tu empresa lograr la interoperabilidad de sus sistemas?

Las empresas suelen llevar a cabo la interoperabilidad en dos niveles: semántico y técnico. En el anterior post, te contamos cómo la interoperabilidad es clave para la innovación. En este blog te detallamos algunas de las maneras en las que las empresas pueden desarrollar la interoperabilidad de sus sistemas.

Interoperabilidad semántica

En este nivel los sistemas que intercambian datos los comprenden perfectamente. En este sentido, la interoperabilidad semántica requiere que la información obtenida sea muy útil y significativa.

Interoperabilidad técnica

Se refiere al nivel de interoperabilidad que permite que diferentes componentes de software cooperen entre sí. Incluyendo, además, en aquellos casos en que el lenguaje de programación y la interfaz sean distintos. Para poder llevar a cabo la interoperabilidad en cualquiera de estos dos niveles es clave transformar los mensajes.

La transformación de mensajes hace referencia a la manipulación y a la modificación de los mensajes en los diferentes sistemas que una organización opera para conseguir una comunicación adecuada entre los mismos. Sería algo parecido a una traducción de los mensajes.

Cuando en una empresa sus sistemas se comunican y estos intercambian mensajes que los comprenden todos, la interoperabilidad está cumpliendo su objetivo.

La integración ágil

Las compañías tienen que gestionar una gran cantidad de datos que les llegan de una diversidad mayor de dispositivos. Este nuevo entorno obliga a las organizaciones a implementar tecnologías que les permitan la interoperabilidad de todos los sistemas. Asimismo, necesitan que todos los sistemas se comuniquen y se entiendan entre sí para beneficiarse.

Integración Distribuida

• Ligero basado en el patrón orientado a eventos de origen comunitario
• Flexibilidad

Containers

• Soluciones nativas de la nube
• Artefactos ligeros, desplegables individualmente
• Escalabilidad basado en contenedores y alta disponibilidad
• Escalabilidad
• APIs
• Endpoints bien definidos, reutilizables y bien gestionados
• Aprovechamiento del ecosistema

Reusabilidad

1. Integración distribuida: algunas docenas de modelos de integración de primer nivel reflejan los flujos de datos y el trabajo de la empresa. Cuando se implementan los modelos de integración en contenedores, se puede hacer a la escala y en la ubicación necesarias para las aplicaciones y los equipos específicos. Este enfoque representa una arquitectura de integración distribuida, en lugar de la centralizada tradicional, y permite que los equipos individuales definan e implementen los modelos de integración que necesitan con agilidad.
2. API: las API estables y bien gestionadas tienen un gran impacto en la colaboración entre los equipos, el desarrollo y las operaciones. Las API agrupan recursos clave en interfaces estables y reutilizables que se pueden implementar y reutilizar como elementos básicos en toda la empresa, con partners y clientes. Las API se pueden implementar junto con los contenedores en diferentes entornos, de forma que los usuarios puedan interactuar con conjuntos de API distintos.
3. Contenedores: los contenedores funcionan como la plataforma de implementación subyacente, tanto para las tecnologías de API como para las de integración distribuida. Permiten que se implemente el servicio adecuado en un entorno específico de manera que se pueda desarrollar, probar y mantener con facilidad y uniformidad. Dado que los contenedores son la plataforma principal para los entornos de DevOps y los microservicios, utilizarlos como plataforma de integración genera una relación mucho más transparente y colaborativa entre los equipos de infraestructura y de desarrollo.

Conclusiones sobre cómo desarrollar la interoperabilidad

En este sentido, muchos sectores se transformaron por completo gracias a la tecnología. En la actualidad, la mayoría de las empresas ofrecen servicios de e-commerce, y es habitual que los usuarios
interactúen con las empresas en el marco digital. Frente a la tendencia de cambio revolucionario, las empresas se ven obligadas a transformar totalmente los entornos de TI. El fin de ello es prestar los servicios digitales nuevos que los clientes desean y para hacerlo mejor y en menos tiempo que la competencia.

Es por este motivo que la solución fundamental es la integración ágil, que constituye una nueva forma de conectar las aplicaciones y los servicios en toda la empresa.

AsÍ pues, la integración ágil combina tres funciones avanzadas de la arquitectura: la integración distribuida, las interfaces de programación de aplicaciones (API) y los contenedores. Todas ellas promueven la agilidad, impulsan procesos nuevos y, como resultado, ofrecen una ventaja competitiva.